¿Votar o no votar? Esto opina la guerrilla del EPR

Milicianos del EPR. FOTO: ejecentral.com.mx

Votar en las próximas elecciones al Congreso es legitimar el terrorismo de Estado y el actual régimen responsable de las condiciones de miseria y pobreza que enfrenta el pueblo.

Así lo señala el Partido Democrático Popular Revolucionario – Ejército Popular Revolucionario (PDPR-EPR), organización revolucionaria mexicana que estalló en modo de guerrilla en 1996 en el estado de Guerrero.

En su última comunicación pública, la guerrilla del EPR toma parte en el debate dado hoy en día entre la clase trabajadora mexicana sobre si vale la pena votar o no; si como proletariado se debe o no participar en las elecciones.


La disyuntiva surge en tanto que votar por partidos de la izquierda burguesa -representada por el Partido del Trabajo (PT), el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y en última instancia del Partido de la Revolución Democrática (PRD)-, supondría un intento de rebajar el totalitarismo del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), ya que ésta condición le ha permitido al partido del presidente Enrique Peña Nieto, aprobar en el Congreso reformas privatizadoras de los bienes y servicios públicos como el petróleo  y la educación, apoyado por su aliado, el  Partido Acción Nacional (PAN).

Ante ello, el EPR llama a reflexionar sobre la realidad concreta del país: ¿Vale o no votar en el marco de una de una democracia burguesa, que no es otra cosa que la dictadura de la burguesía?

Dice la guerrilla mexicana:

“La experiencia histórica nos enseña que votar legitima al régimen actual, el cual es responsable de las condiciones materiales de existencia de miseria y pobreza en las que vive el pueblo (…) El pueblo explotado cada seis años comprueba que votar legitima y respalda la anulación de derechos constitucionales y humanos (…)  Sabe que votar es legitimar el terrorismo de Estado contra el pueblo, aceptar y aplaudir los asesinatos, la desaparición forzada, las ejecuciones extrajudiciales, la tortura, la represión, el hostigamiento y el hambre sobre el pueblo como política terrorista.”

Llama la atención sobre los crímenes de Estado que están quedando impunes y sobre los cuales el régimen burgués no tiene voluntad de resolverlos, ya que fueron cometidos por el Estado mismo, dice el EPR. Por ejemplo, el asesinato de seis y desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, asi como la desaparición forzada de los dos militantes eperristas, Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya. Sobre esto, la respuesta del Gobierno ha sido la criminalización de quienes exigen justicia.

“El Estado quiere diluir su responsabilidad en las detenciones desapariciones  impulsando una ley donde se castigue a individuos, pero desligados del Estado. Se exime al verdadero responsable y se ejerce como un instrumento más para descargar la responsabilidad en figuras míticas y magnificadas como la delincuencia organizada, más que un instrumento de justicia constituye una medida más de contrainsurgencia, porque ahora dicen que las desapariciones las cometen particulares.”

Se sataniza a quien promueve no votar

Abstenerse de participar mediante el voto en un sistema electoral fraudulento y que no representa la opinión de las masas, parece un asunto lógico, si lo que se quiere es construir una transformación profunda de la vida pública. Sin embargo, se ataca desde diversos sectores políticos, sociales y académicos a quien así lo considera bajo el argumento de que con ello se ayuda al PRI.

Candidatos como Gerardo Fernández Noroña, reconocido dirigente político de la izquierda burguesa quien compite como aspirante a diputado federal bajo las siglas del PT, afirma que el llamado a no votar es una campaña “de la derecha”…

Sin embargo, para el EPR, en tanto organización de carácter marxista-leninista, dice que, quienes “estigmatizan”, “descalifican”, o “satanizan” a quienes promueven que la clase trabajadora no acuda a las urnas, no comprenden que “no votar es defender y hacer valer la voluntad popular, porque una parte del pueblo ha decidido condenar al régimen por medio de esta forma de lucha, sobre todo a través del abstencionismo político consciente.”

Impulsar el abstencionismo político consciente es una tarea política que sobrepasa la actual coyuntura electoral y forja una conciencia política revolucionaria, enfatiza la guerrilla mexicana, argumentando que votar en las actuales condiciones de terrorismo de Estado, miseria y descomposición social y económica que enfrenta México es fortalecer y legitimar a la democracia burguesa y condenar al pueblo a mayores condiciones de pobreza y miseria.

Actualmente en México se cuentan por 300 mil las personas que han sido detenidas y desaparecidas por aparatos del Estado mexicano, según el conteo de la Campaña Nacional contra la desaparición forzada. Cuarenta y tres de ellos son los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, sobre los cuales han pasado ya casi ocho meses a la fecha sin que el Estado mexicano sepa responder por lo que realmente ocurrió la noche de la masacre, centrando sus pesquisas en individuos y exculpando de esto al Ejército y a la Policía Federal que, de acuerdo a investigaciones periodísticas, también participaron del genocidio. Un genocidio en el cual participaron las estructuras municipal, estatal y federal, administradas por el PRD y el PRI..

¿Es políticamente cosecuente votar en esas condiciones?